viernes, 16 de septiembre de 2016

HASTA USTED, GUILLON

Acogiéndome de las palabras de Sergio F. Aleixo, una vez mas la FEB y sus colaboradores, fieles a su condición estatutaria como integrantes de la "escuela" roustanguista y concordando con el opúsculo de Los Cuatros Evangelios de J.B. Roustaing nuevamente osan contrariar las advertencia de Allan Kardec, cuando en junio de 1866 recomienda públicamente que la obra de Roustaing podría haber sido reducida a dos, o la misma a un solo volumen para gane en popularidad, pero no fue así y esta obra de Los Cuatro Evangelios al tocar suelos brasileños hacen su traducción al portugués, y en lugar de coger la advertencias de Kardec, lo que hacen es agrandar su volumen a 4 libros, contrariando nuevamente al Codificador y con la ayuda de Guillo Ribeiro ex Presidente de la FEB, este libro aumenta, llegando a incrementar un cuarto y hasta suspirando por un quinto volumen, lean a continuación este articulo en el cual muestra una vez mas esa fidelidad de la FEB y sus colaboradores que le "muestran" a Kardec.
         
Traducción de Jaime Baquerizo S.
Para consultar el articulo original en Portugués ingrese a esta dirección:
http://geliolacerda.blogspot.com/2009/11/ate-voce-gullion_07.html

  


HASTA USTED, GUILLON

Muchas críticas ya se hicieron sobre los Cuatro Evangelios de JEAN BAPTISTE ROUSTAING. Apenas una permaneció sin destacar, osea, hasta el Traductor Dr. Luiz Olímpio Guillon Ribeiro, (como Kardec ya había advertido públicamente), deja claro la prolijidad de la obra, esta vez utilizando el lenguaje subliminal para no desagradar a sus compañeros febeanos. Veamos los abusos (atropellos) y errores del Traductor, desde el principio, titulado – DOS PALABRAS .Ed. FEB – 1971.

PÁGINA 10 - DOS PALABRAS - GUILLON RIBEIRO – TRADUTOR

O

“PÁGINA 10 – DOS CARAS – GUILLON REBEIRO – FEBEANO”

En junio de 1866 Allan Kardec ya había opinado sobre la obra de Roustaing. De lo contrario, consulte; y Kardec decía:

La obra podría haber sido reducida a dos, o la misma a un solo volumen…

Si Kardec, un profundo conocedor del espiritismo ya había advertido sobre la prolijidad de la obra de Roustaing, se vuelve a recordar: podría ser reducida de 3 a 2 o incluso a una, cuáles fueron las razones que llevaron al traductor Dr. Luiz Olímpio Guillon Ribeiro, el cual fue director por 26 años de la FEB, a incrementar un cuarto (4to) y hasta suspirar por un quinto (5to) volumen?

En pocas palabras: las razones del traductor:

El entendió componer un índice remisivo (referencial), reconociendo defectos o fallos, deficientes, imperfectos, que sin embargo, sin él, la obra hubiera presentado extremas dificultades, completa imposibilidad de localizar grandes cuestiones que el espiritismo veía fuera de foco. Además de prever o vislumbrar que las materias no presentaban o mostraban del modo que fueron divididas, buena razón explicativa”    

Como se observa el traductor reconoce, también, como Kardec, la prolijidad contenida en ella, mientras tanto, no podría reducirla por motivos obvios, así que, busco una salida, que agradara a los febeanos osea a los de la FEB: hacer 4 volúmenes, ya que, como menciona el mismo arriba, “seria completamente imposible localizar grandes cuestiones que el espiritismo veía fuera de foco por la forma que fue dividida, más allá de no encontrar una buena razón explicativa” (que lo destacamos nosotros)

UNA INDICACIÓN MALICIOSA: Ahora bien, si la obra es el ápice, el pináculo de la verdad divina, no vistas en ninguna otra (palabras del traductor), porque razón la Editora recomienda la literatura de Kardec: El libro de los Espíritus y el Evangelio según el espiritismo? (que lo destacamos nosotros).

UNA REFLEXIÓN: El traductor habría escrito un quinto (5to) volumen, pero afirmo que le falto capacidad. Tuvo, por lo tanto la “nobleza” en reconocer tal franqueza. Pero siendo un adepto (aficionado, hincha, seguidor) de la obra “divinizada”, frente a tantas incertidumbres, porque contrario las enseñanzas de su maestro Roustaing, sabiendo “que una de las causas de muchos espíritus fallidos es el mal uso del libre albedrío?”  Con todo nuestro respeto, el Sr, Guillon Ribeiro como traductor, dentro del mínimo ético, debería respetar los textos y otros materiales cuyas traducciones le fueron confiadas, no utilizando sus conocimientos para desfigurarlos o alterarlos;

Que pasen las palabras, más la verdad debe ser dicha: El Dr. Luiz Olímpio Guillon Ribeiro, con su falsa modestia, ciego espiritualmente, dejo muy transparente para quien quisiera ver, su otra cara de traductor y poliglota que fue al servicio de la Federación Espirita Brasilera.

Puntualizando. Si hubiera tomado la dirección de la imparcialidad, limitándose a lo estrictamente necesario, la obra (tal vez) habría ganado en popularidad, como ya lo había dicho Kardec.          

lunes, 12 de septiembre de 2016

UMBRAL Y NUESTRO HOGAR – UNA REALIDAD QUE NO EXISTE FRENTE A LA DOCTRINA DE LOS ESPÍRITUS.

Traducción de Jaime Baquerizo 
Consultar articulo original en la lengua portuguesa en esta dirección:
http://umolharespirita1.blogspot.com/2011/10/nosso-lar-e-umbral-uma-realidade-nao.html

Un verdadero best seller de la F.E.B. para los espiritualistas “espiritas” devotos


Um olhar Espírita

Este blog tem como objetivo a divulgação da Doutrina Espírita dentro dos preceitos da Codificação kardeciana. 

Domingo, 9 de octubre de 2011




UMBRAL Y NUESTRO HOGAR – UNA REALIDAD QUE NO EXISTE FRENTE A LA DOCTRINA DE LOS ESPÍRITUS.


Por Maria das Graças Cabral



Desde la publicación del libro Nuestro Hogar por el espíritu André Luiz, psicografiado por el médium Chico Xavier, vimos que el infierno católico se transformó en “umbral”, impulsado por la imaginación de los “espiritas” que todavía siguen arraigados a la dogmática católica. Por otro lado, la “ciudad espiritual” denominada como “Nuestro Hogar”, se convirtió en cielo, cuyo destino es deseado o anhelado por todos aquellos que sueñan con la felicidad cuando regresen o retornen al plano espiritual.

Luego al comienzo de la obra en discusión, nos encontramos con el "umbral", por ser en este el lugar de tormentos que se encontraba André Luiz en un estado profundo de perturbación.

Enfrente de su relato, se identifica de pronto la incontestable semejanza con el “infierno” católico, al ser sobre ese descrito, como una región tenebrosa, con seres diabólicos, y sufrimientos acerbos (pungente).

El autor espiritual asevera que es informado por Lísias (su orientador) que la localización del “umbralempieza en la corteza terrestre, siendo una zona oscura de cuantos en el mundo no se decidieron a cruzar las puertas de los deberes sagrados” (…) (Nuestro Hogar, p, 79).

Establece el compañero de André Luiz, que el Umbral funciona, como región destinada al agotamiento de residuos mentales: una especie de zona purgatorial, donde se queman las prestaciones o material deteriorado de las ilusiones que la criatura adquirió por mayor, menospreciando la sublime enseñanza de una existencia terrena”. (…) “En esa región se concentra, todo lo que no tiene finalidad para la vida superior, resaltando que la Providencia Divina ha actuado sabiamente, permitiendo que se crease tal departamento e torno (alrededor) del planeta”. (Subrayado) (Nuestro Hogar, p. 79/81) 


Al ser “retirado” del umbral por Clarencio, después de ocho años de sufrimientos y locura, relata André Luiz haber sido conducido a una ciudad espiritual, denominada Nuestro Hogar. La referida ciudad tenía su organización política conducida atraves de un Gobernador y sus Ministerios. 

Reportándose al actual Gobernador de la ciudad, André Luiz es informado por Lísias, que es el mismo que había conseguido colocar en orden los disturbios y escisiones (división) que turbaban a la ciudad, en razón de las cuestiones que envolvían la “distribución de alimentos” entre los Espíritus moradores de Nuestro Hogar.

Según su narrativa, la ciudad era una belleza impresionante, con “bastas avenidas, adornadas de árboles frondosos. Aire puro, atmosfera de profunda tranquilidad espiritual”. (Nuestro Hogar, p, 58).

El autor espiritual no evita en describir las bellezas de Nuestro Hogar, desde la arquitectura de sus predios, sus inmensos bosques y jardines con flores exóticas y fuentes de aguas cristalinas, la belleza de las obras de arte y la elegancia del mobiliario que guarnecían sus Ministerios y casas, hasta las melodías sublimes oídas por todos los moradores al final de la tarde, o cuando eran las reuniones y oraciones.

Ante tal escenario, la referida ciudad se convierte en un paradigma del cielo para los “espiritas”, puesto que, llegar allí, más allá de los cuidados administrados en sus excelentes hospitales, posteriormente uno tiene la posibilidad de morar en la bellas y confortables casas, conjuntamente con los entes (entidades) queridos, todos debidamente protegidos por las altas y seguras murallas defensivas de esta maravillosa ciudad, que tiene al sugestivo nombre de “Nuestro Hogar”.

Entretanto, en la condición de espiritas, somos conocedores de las necesidades de un estudio constante y sistemático de las Obras Básicas, para que podamos de forma justa y lucida evaluar las informaciones que nos llegan del plano espiritual, atraves de los mensajes mediúmnicos, como es el caso de la obra que estoy comentando.

Para este intento, precisamos evaluar las informaciones recibidas teniendo como paradigma las Obras Básicas, puesto que estas, pasaron el Control Universal de las Comunicaciones Espiritas, como bien nos esclareció Allan Kardec, el insigne Codificador de la Doctrina de los Espíritus, en la parte introductoria de El Evangelio Según el Espiritismo.

Para comenzar, haremos un breve análisis de que nos dicen los Espíritus Superiores en el Libro de los Espíritus, cuando en su Capítulo VI, trata de la “Vida Espirita”. Haremos la transposición literal de algunas preguntas hechas por Kardec a los Espíritus Superiores, con sus respectivas respuestas, y enseguida tejeremos comentarios y conclusiones pertinentes al asunto propuesto.

 - Comencemos por la pregunta 224 del Libro de los Espíritus, cuando kardec indaga a los Espíritus Superiores, lo que es el alma en los intervalos de las encarnaciones. La respuesta dada es la siguiente: - Espíritu errante, que aspira a un nuevo destino y lo espera.
Por lo tanto, André Luiz, estaba en la condición de Espíritu errante, aguardando una nueva encarnación según la respuesta de los Espíritus.

- Enseguida, veamos la pregunta 227 formulada por el Codificador: - De qué manera se instruyen a los Espíritus errantes; pues ciertamente no lo hacen de la misma manera que nosotros?
Respuesta: Estudian su pasado y procuran el medio de elevarse. Ven, observan lo que pasa en los lugares que recorren; escuchan los discursos de los hombres esclarecidos y los concejos de los Espíritus más elevados que ellos, y eso les proporciona ideas que no poseían. (subraye y coloque con negrito)

Se observa por lo tanto, que la propuesta para los Espíritus en la erraticidad no es el trabajo manual de limpiar suelos, limpiar enfermerías, etc., es más de trabajar su mente y esclarecer su “yo” siempre objetivando una mejor preparación intelectual y MORAL, para enfrentar los embates de su próxima encarnación.

 - Analicemos ahora lo que propone la pregunta 230 del Libro de los Espíritus: - El Espíritu progresa en el estado errante?
Respuesta: Puede mejorarse bastante, siempre de acuerdo con su bondad y su deseo; más en la existencia corpórea que él pone en práctica a las nuevas ideas adquiridas. (Subrayado)

Mediante lo expuesto, es un hecho que:

1º) La vida espiritual no es igual a la vida material, puesto que la condición de conciencia y emocional del individuo es otra, el medio es otro, la realidad es otra, la dimisión tiempo/espacio es otra, las percepciones y sensaciones son otras.

2º) Las intrusiones de los Espíritus errantes no se hacen de la misma manera que las de los encarnados;

3º) Los progresos efectivos de los Espíritus solo se da atraves de las existencias corpóreas, que es cuando él pone en práctica con las nuevas ideas adquiridas en el Espacio.

No obstante, lo que se desprende de Nuestro Hogar, es que los Espíritus errantes viven en la espiritualidad de una vida semejante a la vida de los encarnados puesto que:

A) Los Espíritus moran en casa con sus familias;
B) Trabajan y son remunerados (bonos-horas);  
C) Tienen relaciones amorosas, compromisos y hasta casamientos como la iglesia católica;
D) Comen, beben, toman baños y duermen;
E) Viajan en aerobús, van a fiestas, cinemas, conciertos y reuniones;
F) Obedecen a un régimen político sobre las órdenes de un gobernador que administra la ciudad atraves de sus Ministerios.

O sea, tienen una verdadera vida social, con todas las implicaciones generadas por las relaciones humanas que envuelven familias, amigos, enemigos, trabajo y política.

Se pregunta: - Para que reencarnar, si los Espíritus ya viven todas las posibilidades oriundas de la vida en sociedad, considerada por Kardec, como la “piedra de toque” para la evolución humana?!

 - Más prosigamos en nuestro estudio ahora analizando la cuestión 234 del Libro de los Espíritus, que trata de los Mundos Transitorios, y Kardec hace el siguiente cuestionamiento a los Espíritus Superiores:

- Existen, como fue dicho, mundos que sirven de estaciones o de lugares de reposo a los Espíritus errantes?
Respuesta: - Si, hay mundos particularmente destinados a los seres errantes, mundos que ellos pueden habitar temporalmente, especie de campamentos, de lugares en que pueden reposar de erraticidades muy largas, que son siempre un poco penosas. Son posiciones intermedias entre los mundos, graduados de acuerdo con la naturaleza de los Espíritus que puedan alcanzarlos, y que gozan de mayor o menor bienestar. (Subrayado)

- Y la pregunta 236 – Los mundos transitorios son, por su naturaleza especial, perpetuamente destinados a los Espíritus errantes?
Respuesta: - No, su superficie es apenas temporal.

- Oportuno resaltar el desdoblamiento de la pregunta 236-a: - Son ellos al mismo tiempo habitados por seres corpóreos?
Respuesta: - No, su superficie es estéril. Los que lo habitan no precisan de nada. (Subraye y coloque con negrito)

Ante tanta información importante, se observe que:

 1º) Si hay posibilidades de los Espíritus errantes que se acomodasen en “Mundos Transitorios

2º) Tales mundos son de superficies estériles, o sea, sin predio, bosques, fuentes, etc;

3º) Los Espíritus no precisan de nada de eso en la erraticidad.

Pasemos ahora al análisis del ítem III del Libro de los Espíritus, que trata de las Percepciones, Sensaciones y Sufrimientos de los Espíritus.

- Kardec lanza el siguiente cuestionamiento en la pregunta 253: Los Espíritus experimentan nuestras necesidades y nuestros sufrimientos físicos?
Respuesta: - Ellos lo conocen porque lo sufren, pero no lo experimentan como ustedes, porque son Espíritus. (Subrayado).

- Pregunta 254 – Los Espíritus sienten fatiga y necesidad del reposo?
Respuesta: - No puede sentir la fatiga como la entendéis, y por lo tanto no necesitan del reposo corporal, pues no poseen órganos en que las fuerzas tienen que ser restauradas. Mas el Espíritu reposa, en el sentido de no permanecer en una actividad constante. El no actúa de manera material, porque su acción es toda intelectual y su reposo es todo moral. Hay momentos en que su pensamiento disminuye de actividad y no se dirige a un objetivo determinado; este es un verdadero reposo, mas no se puede compararlo al del cuerpo. La especie de fatiga que los Espíritus pueden experimentar está en razón de su inferioridad, pues cuanto más se elevan, de menos reposo necesitan. (Subrayado)        

- Pregunta 255 – Cuando un Espíritu dice que sufre, de que naturaleza es su sufrimiento?
Respuesta: - Angustias morales, que lo torturan más dolorosamente que los sufrimientos físicos. (Subrayado)

Mediante lo expuesto contestamos que:

1º) Las necesidades físicas de que se quejan los Espíritus son apenas “impresiones

2º) Los Espíritus no precisan de reposo, ni obviamente de alimento, puesto que no poseen árganos en que las fuerzas tienen que ser restauradas, ni menos aparato digestivo, sistema circulatorio, nervios o géneros;

3º) El sufrimiento del Espíritu es totalmente moral, y no físico.                 

Para finalizar el presente estudio en lo que concierne a la vida espiritual, nadie mejor que Kardec, que con mucha propiedad se expresa así: “Existen, por tanto, dos mundos: el corporal compuesto de los espíritus encarnados; y el espiritual, formado de los espíritus desencarnados. Los seres del mundo corporal, debido a la misma materialidad de su envoltorio, están ligados a la Tierra o a cualquier globo; el mundo espiritual se encuentra por todas partes, alrededor de nosotros como en el espacio, sin algún límite designado. En razón misma de su naturaleza fluidica de su envoltorio, los seres que lo componen, en lugar de moverse penosamente sobre el terreno, trasponen las distancias con la rapidez de su pensamiento. La muerte del cuerpo es la ruptura de los lazos que lo tenían cautivo”. (Revista Espírita. Marzo de 1865, p. 99) (subrayado)

En fin añade el codificador  

“La felicidad está en razón directa del progreso realizado, de suerte que, de dos Espíritus, el uno puede ser tan feliz en cuanto al otro, únicamente por no poseer el mismo adelantamiento intelectual y moral, sin que por eso precisen estar, cada cual, en lugar distinto. Además que juntos, puede uno estar en la oscuridad, en cuanto para el otro todo se resplandece, tal como un ciego y un vidente que se dan las manos: este percibe la luz de la cual aquel no recibe la mínima impresión. Aunque la felicidad de los espíritus es inherentes a sus cualidades, la que ellos extraen en todas partes en que se encuentran, sea en la superficie de la Tierra, en medio de los encarnados, sea en el espacio”. (Revista Espírita. Marzo de 1865, p. 100) (subrayado)

Delante de las palabras esclarecedoras de Allan Kardec, podemos aseverar de la inexistencia de lugares determinados en el plano espiritual, destinados a depuraciones de penas, como el “umbral”, o lugares semejantes a las ciudades materiales terrenas, como bellezas naturales y construcciones, para abrigar Espíritus errantes a los moldes de Nuestro Hogar.

Como muy bien establece Kardec, el dolor y la felicidad son experimentadas por los Espíritus, sea en la superficie de la Tierra en medio de los encarnados, sea en el Espacio. Como también dos Espíritus, uno feliz y el otro infeliz no precisan estar en regiones diferentes para vivenciar sus realidades espirituales distintas, pudiendo estar uno al lado del otro.

Vale resaltar, que el asunto no está agotado en este sencillo enfoque, sino que nos despierta a revisar ciertos conceptos atraves de un estudio serio y efectivo de las Obras Básicas, para que nos emancipemos de la ignorancia que nos aflige, y nos hace esclavos de las informaciones más absurdas, que la tomamos como verdades por el simple hecho de que vienen del plano espiritual atraves de un determinado Espíritu, que muchas veces se toman utilizando nombres respetables, o por la consideración debida al médium a través del cual se produjo la comunicación.

Sería interesante delante de las consideraciones propuestas una relectura de la escala espirita – de la pregunta 100 del Libro de los Espíritus, como también un estudio más profundo de los procesos de la obsesión, mistificación, y fascinación, brillantemente tratados por los Espíritus Superiores en el Libro de los Médiums.

Finalizando, precisamos inter analizar que en la condición de Espíritus errantes estaremos trabajando cuestiones intrínsecas a nuestra individualidad, en lo que concierne o respecta a nuestro intelecto y a nuestra moralidad, puesto que, como nos dijeron muy significativamente los Espíritus Superiores, que el reposo o descanso del Espíritu es totalmente mental.

Tenemos conciencia, que al retorno a la verdadera vida nos llevara a conocer la obra incalificable de nuestro Creador. Nuestra casa somos nosotros mismos, libres, viajando por la fuerza del pensamiento atraves de ese inmenso cosmos, conociendo mundos, asistiendo la formación de galaxias, y admirando la perfección de esa obra, que ni el mayor de los artistas de la Tierra podrá reproducir.